En la
parroquia de Olmedo del cantón Cayambe, se celebran las fiestas de San Juan,
entre los meses de junio a agosto, y son una fusión de los rituales del Inti
Raymi y el sincretismo religioso, que en la actualidad forman parte de la
tradición local.
En todas las
comunidades locales se aprecia una riqueza cultural manifiesta en sus
costumbres y tradiciones; la más importantes de ellas es la celebración de las
fiestas de San Juan.
Se manifiesta a través
de la presentación de grupos de danza y música que bailan por las calles, casas
y plazas, a ritmo de sanjuanitos y coplas, con los disfraces de personajes
propios de la fiesta como: aruchicus, diablo humas, chinucas y payasos,
danzando en pregones, ramas de gallo tomas de la plaza, desfiles de la alegría,
corridas de toros populares o visitando las casas de los vecinos en las comunidades.
La
parroquia Olmedo-Pesillo acoge en su territorio andino un sinnúmero de enfoques
de tipo naturales y culturales, entre montañas, lagunas, ríos, bosques andinos,
vestigios arqueológicos y construcciones patrimoniales de los últimos siglos,
todo ello alrededor de un valle agro-ganadero en que destaca su paisaje verde
de pastizales. Este es el primer documento que muestra gráficamente el
esplendor de esta zona, altamente potencial para el desarrollo del turismo
rural local.
Olmedo es una parroquia rural que tiene un paisaje
de gran encanto, un lugar que gusta a los visitantes debido a que la
inmediación al espectacular nevado Cayambe, sus atractivos como las
lagunas de Puruhanta y San Marcos.
Los habitantes de éste lugar todavía lucen sus vestimentas tradicionales y mantienen su cultura lo cual llama la atención del turística.
Los habitantes de éste lugar todavía lucen sus vestimentas tradicionales y mantienen su cultura lo cual llama la atención del turística.
Parroquia
rural Olmedo del cantón Cayambe, conserva tradiciones y cultura de los pueblos
ancestrales que habitaban en Pichincha. Sus
fiestas tradicionales como el Inti Raymi, conocida también
como fiesta del Sol. La iglesia católica reemplazó las fiestas
tradicionales por la fiesta de los patrones es por eso que en el Inti Raymi es
la fiesta de San Juan también, pero en esta población todavía se conserva sus
tradiciones.
La
historia de la parroquia Olmedo ha ayudado a consolidar y mantener la tradición
y la cultura. Dentro de la fiesta de San Juan se encuentran las ceremonias:
Rama de Gallos, que consiste en un agradecimiento a las personas
representativas del Pueblo de Olmedo.
El pase de la rama se festeja con Sanjuanes disfrazados de aruchicos, tiene 13 gallos, 12 son entregados a los homenajeados y el último es repartido en presa a trece personas, quienes devolverán el año venidero un gallo vivo a fin de que continué el hecho.
El pase de la rama se festeja con Sanjuanes disfrazados de aruchicos, tiene 13 gallos, 12 son entregados a los homenajeados y el último es repartido en presa a trece personas, quienes devolverán el año venidero un gallo vivo a fin de que continué el hecho.
Cada sector tiene sus propias características, es fuerte, sonora, viril y de espíritu guerrero, acompañada de flautas, bocinas, tambores que por milenios vienen manteniendo nuestra cultura.
-Ubicación: Esta parroquia está ubicada desde Cayambe se toma la Panamericana norte o el camino empedrado por la parroquia de Ayora el recorrido es de 18 Km.
*Fiestas
Populares:
San Juan
se celebra en el Centro de Olmedo desde el 15 al 26 de junio y estas mismas
fechas festejan igualmente en la Comunidad de Pesillo.
-La danza
de los aruchicos, chinas
y diablumas que ahora tiene características de ceremonia religiosa de adoración
al padre sol y al importante y bello nevado Cayambe.
-El
aruchico: lleva en el sombrero
múltiples cintas, va tapado con una carteta de malla, porta una guitarra con la
que entona la música que con mucha alegría bailan las chinas. Cubre sus piernas
con un pesado zamarro de piel de chivo y en la cintura cuelgan pesadas campanillas
que con su sonido claro y vibrante acompañan el tranco ágil e incansable del
artista.
-Las
chinas: van vestidas como de
costumbre, con blusas nuevas, bordadas finamente y cubiertas con una manta, sus
faldas son de colores vivos que van desde el rojo al amarrillo, adornados con
cintas brillantes, cubre su cabeza con un sombrero y su rostro con un fino
pañuelo, va junto a sus aruchicos entonando picarescas coplas tanto en quichua
como en castellano.
-El
payaso: Su vestimenta es
multicolor; cubre su cabeza con un gran bonete, su cuello con un pañuelo, su
rostro con una careta burlona y porta un chorizo relleno de trapos con el que
golpea a los niños o a sus conocidos durante el trayecto. El payaso pone la
nota de humor en la comparsa, es el encargado de preceder a los artistas y
decir a los dueños de casa en forma picaresca, el deseo de los bailarines,
logrando de este modo comida, bebida y algunas en su shigra hasta cuando el
hambre apremie.
-El
diabluma: cubre su rostro con una
máscara de tela de colores vivos, adornada con doce cachos que representan cada
mes del año rellenos de tela, un zamarro de chivo, y en sus manos sostiene un
gigantesco látigo, con el que protege al grupo, en la comparsa trota todo el
tiempo.
-Rama de
Gallos: Dentro de la fiesta de San
Juan se encuentran las tradicionales: Rama de Gallos, en tiempos anteriores el
pase de la rama era un acto de agradecimiento al dueño de la hacienda o patrón.
Ahora tiene una persistencia dentro de este contexto, añadiéndose el
agradecimiento a otras personas representativas del pueblo.
-El pase
de la rama: se festeja con San Juanes
disfrazados de aruchicos, tiene 13 gallos, 12 son entregados a los homenajeados
y el último es repartido en presa a trece personas, quienes devolverán el año
venidero un gallo vivo a fin de que continué la vigencia del hecho. En
reciprocidad, quienes reciben la rama tiene la obligación de darles de comer y
de beber al prioste y su comitiva.
El sanjuanito es un género musical de música andina, que se baila y se
escucha en Ecuador, la zona andina del sur de Colombia, (en Nariño y Putumayo)
y en la costa norte de Perú (Tumbes y Piura). Muy popular a inicios del siglo
XX, es un género originario de la provincia de Imbabura. El "sanjuanito"
tiene origen preincaico; es decir, existe antes de la conquista española.
A diferencia del pasillo, es un género alegre y bailable que se ejecuta
en las festividades de la cultura mestiza e indígena de esta zona
transnacional. Su molde sirvió de base para que muchos villancicos se adaptaran
a su ritmo.
ETIMOLOGÍA
Sobre el origen de su nombre, el musicólogo ecuatoriano Segundo Luis
Moreno conjetura que se debió al hecho de que se danzaba durante el día de los
rituales indígenas del Inti Raymi, que a la invasión europea, los españoles
hacen coincidir con el natalicio de San Juan Bautista, el 24 de junio.
Algunos de los Sanjuanitos más conocidos son por su ritmo alegre y
festivo son: Pobre corazón, Esperanza, El llanto de mi quena, y Sanjuanito de
mi tierra.
Este ritmo ecuatoriano posee y trasmite alegría y emociones que motivan
a los asistentes de programas y fiestas de pueblo o urbanas a bailar formando
círculos, tomados de las manos, girando para uno y otro lado.
Es muy común apreciar en las fiestas de cada ciudad comparsas, que
bailan al ritmo de estos alegres sanjuanitos por las diversas calles, haciendo
gala de sus trajes autóctonos, costumbres y cultura que se trasmite de
generación en generación.
INSTRUMENTOS
El Sanjuanito es interpretado con instrumentos autóctonos del Ecuador:
bandolín, pingullo, dulzaina y rondador, así como con instrumentos extranjeros,
como la quena, zampoña, guitarra y bombos.
En la actualidad existen diversas agrupaciones musicales que hacen uso
de la tecnología musical moderna, como violines, bajos, y guitarras clásicas
con adaptaciones eléctricas y electrónicas para amplificar el sonido
El
calendario de fiestas populares del Ecuador señala el 24 de junio para la danza
y el sanjuanito, ritmos musicales que se remontan a la época prehispánica, pero
que a causa del mestizaje se modificaron por la acción de algunos religiosos de
la época de la colonia, empeñados en terminar con ciertos ritos que
consideraban paganos. Aun así, en medio del sincretismo y de otros factores de
influencia, aquellos están vigentes.
Junio,
mes rico en manifestaciones tradicionales y folclóricas, permite disfrutar los
compases del sanjuanito y los pasos de las danzas en las festividades de san
Juan, del Corpus Christi, del sol y la cosecha y de los santos Pedro y Pablo.
Al
sanjuanito o sanjuán se lo considera el género musical propio de la región
andina de Ecuador, según el investigador Juan Mullo. Para otros estudiosos, el
ritmo nació en la provincia de Imbabura y no proviene de la devoción al santo,
sino que se lo bailaba en días cercanos a la fiesta religiosa establecida por
la Iglesia católica.
En
cambio, la danza se manifiesta en todas las regiones, pues en la Costa hay El
costillar, Alza que te han visto, La iguana, El galope, El moño, Polca orense,
Agárrate que me agacho, Corre que te pincho, entre otras.
En la
Sierra están las danzas de los yumbos, del abago, de los huacos, de la
llaminga, de la curiquinga, de los rucus; y en la Amazonía, las de la chonta y
de la culebra.
Entre los
sanjuanitos están La chicha de la santa, de Abilio Bermúdez; Pobre corazón, de
Guillermo Garzón; El aguacerito y Chiquichay, de Rubén Uquillas; Cantando como
yo canto, de Germán Salinas; Ay, amores hallarás, de Marco V. Bedoya y Víctor
M. Salgado...